DAÑO COLATERAL

Lamentablemente el no asesinar en este espacio durante tanto tiempo, ha provocado que empiece a matar con palabras a inocentes personajes en mi vida real. No me había dado cuenta de lo terapéutico que resulta desaparecer de la faz de mi tierra virtual a todo aquel que según yo lo merece. Ya lo había mencionado alguna vez, que en vez de enfrascarme en discusiones sin sentido era mejor pensar en lo que iba a escribir una vez pasado el mal rato. Era feliz, y mi entorno también porque no es que siempre enganche en las peleas, también me las trago y eso termina por salir usualmente en el momento y con la persona equivocados.
La genuina intención es de volver a las canchas, malhechores y tiempo mediante, para dejar de disparar al aire y que le llegue mi descargo a quien no corresponde.

EFECTO OBAMA

No sé qué tan cierto sea, pero según lo que uno ve en las series de televisión y en las películas de Estados Unidos, es bastante común en ese país demandar a la gente por todo y por nada. Es algo así como el segundo deporte favorito después del béisbol. Entonces, dado que Obama está de visita por acá, tiendo a pensar que esta adorable clienta nuestra se pudo haber contagiado con ese espíritu deportivo.

Entiendo que en la mente de un cliente el que está encargado de cobrar es siempre el malo de la película, es el ser despiadado que no entiende que la gente tiene otras obligaciones y problemas, es el que se levanta todas las mañanas con una sonrisa en el rostro pensando a quién le va a amargar el día notificándole lo que debe. Debo decirles que en nuestro caso por lo menos no es así. La ingrata labor de cobrar es muy desagradable, y yo por lo menos no soy ningún Don Cangrejo que disfruta esta práctica. El tema es que si uno suma uno por uno todos los clientes que deben, y se van perdonando y retrasando los plazos, llegamos a un punto en que la bola de nieve de facturas impagas no permite que uno cumpla con sus propias obligaciones, porque las cuentas de electricidad, servicio telefónico y arriendo nos las cobran igual todos los meses.

Después de haberme ido por las ramas para tratar de generar algo de empatía hacia uno de mis oficios, vuelvo a enfocarme en la víctima de hoy quien nos debe la mensualidad de febrero, y a la cual estando ya en los descuentos de marzo le fue enviada una notificación avisando que debe cancelar lo antes posible(sólo febrero, nadie habló de marzo que en rigor también debe), o bien se le suspenderá el servicio. Sospecho que decirle a alguien que debe algo es lo más vejatorio que puede existir, de lo contrario no me explico el tenor de su respuesta. Nos comunicó que su abogado está presentando una querella contra nosotros por cobros indebidos y difamación. Menciona que ella es una persona muy ocupada y con un gran prestigio. Sugirió además revisar nuestros registros antes de amenazar con la suspensión, lo cual me parece inconsecuente ya que ella atacó sin previa conversación. Efectivamente es posible que haya cancelado y nosotros no lo sepamos, pues muchos clientes depositan directamente en nuestra cuenta corriente, y como los valores son los mismos para  muchos de ellos, si no envían el comprobante de depósito o transferencia asociado a la factura no tenemos cómo enterarnos a quién corresponde, soy un héroe/villano mundano, no poseo el poder de adivinar. Si efectivamente es una persona muy ocupada entonces debió responder con un escueto mensaje diciendo: "pagué tal día, arréglatelas con esta información". Creo que entablar una demanda por una razón tan básica quita más tiempo, y además un poco de prestigio por lo menos en mi opinión.

En fin, muy probablemente esta sea una partida en falso de nuestra atleta y no exista una demanda de por medio, pero sí estoy clara que deportistas como estos merecen cortarse el pescuezo con la cinta al llegar a la meta.

DESAYUNO ESTILO MASTERCARD

• Probar desayunar fuera de la casa, 35 minutos más tarde al trabajo.
• Jugo de naranja recién exprimido, 7 veces más caro de lo que me saldría hecho en casa.
• Tostadas en pan especial con queso crema, 4 veces más caro de lo que me saldría hecho en casa.
• Esperar 20 minutos para que me lo entreguen, el doble de lo que me demoraría prepararlo en casa.
• Que haya sido el empujoncito necesario para escribir de nuevo, no tiene precio.

UNA MUERTE SUI GENERIS

Uno de los conserjes de nuestro edificio siempre tiene el turno de noche. Al principio nos parecía raro e injusto que nunca cambiara el turno, pero conversando con él una vez nos dimos cuenta que le encanta. En muchos aspectos es bueno que le guste, porque nunca se queda dormido y está siempre atento viendo por las cámaras quién entra y sale. Nos cae muy bien, y creo que es el conserje que más vemos pues llegamos después de las once por lo menos tres noches a la semana, y salimos con las perritas a las seis de la mañana casi a diario, así que conversamos bastante y tenemos muy buena relación.

Entonces, por qué aparece en este espacio en el cual la mayoría de los mencionados muere....pues porque nos ha agarrado tanta confianza, que nos toca el citófono para que bajemos a recoger nuestra correspondencia a CUALQUIER HORA. Una cosa es que estemos despiertos, pero otra muy distinta es bajar a buscar las cuentas! Al principio, y después de una lucha por quién de los dos se sacrificaba, bajábamos pues tiene sus años y la verdad no queremos discutir con él. Pero la última vez me tocó a mi, y le comenté amablemente que para bajar tenía que vestirme pues por lo general a las doce de la noche si estoy en mi casa estoy en pijama, así que prefería que no me avisara que tengo correspondencia por retirar. Me dijo que no le gusta que se acumulen cosas, que si él ve que es algo importante prefiere repartirlo a que se pierda, yo le digo que se quede tranquilo, que por lo general si estoy esperando algo pregunto frecuentemente, y de todas maneras paso por lo menos una vez a la semana a retirar cosas. Me ofreció subir la correspondencia, le dije que para abrir la puerta también tengo que vestirme, y encerrar a los perros porque se me escapan y además cuando suena el timbre empiezan a ladrar, etc.....y pensé que le había quedado claro pero ACABA DE TOCAR EL TIMBRE!!!!

Me dejó las cuentas, tomó el ascensor, pero al primer piso no llegó, alguien la cuerda le cortó, y se cayó... y así Don Sergio murió...

LA TOMA DE LA BASTILLA

No sólo las acciones del Rey pueden desencadenar revoluciones, el Bufón de la corte también puede provocar lo suyo, o al menos eso ocurre en mi feudo laboral. Ese personaje que nos hace reír, y que nos deleita muchas veces con las salidas más divertidas, lo hace a menudo y muy a pesar mío a costa de los demás. Ciertamente es difícil no celebrar su ingenio, ya que la lengua más rápida de la comarca sabe bien cual es su lado fuerte. Sin embargo esa picardía sólo disfraza amargura, y lo ha llevado al cadalso que más de una vez ha sabido sortear, aunque debo decir que el indulto se le ha otorgado en algunas oportunidades por razones ajenas a su astucia.

Como no hay mal que dure diez años*, y no quiero ser la tonta que lo resista, voy a iniciar mi propio catorce de julio. Voy a terminar con su régimen de burlas, de arrumacos de frente y puñaladas por la espalda, de bufidos y quejas constantes, de comentarios ácidos, de mentiras y de sarcasmo. 

Voy a soltar la guillotina sobre su cabeza...mientras entono la Marsellesa.

*no me equivoqué, en abril se cumplirán diez.